Nº 38.-Diccionario.-a

38
FrançaisEnglishDeutschEspañolItalianoNederlands
mortaisédovetailedbreitzinnenförmigenclavadotroncato in lambellazwaluwstaartvormig

Schleswig-Holstein.

Jutlandia y el extremo septentrional de Alemania donde puede apreciarse Schleswig y Holstein en el actual Estado federado alemán de Schleswig-Holstein.


 (en bajo alemán, Sleswig-Holsteen; en frisón septentrional, Slaswik-Holstiinj; en danés, Slesvig-Holsten) es uno de los 16 estados federados de Alemania. Su capital es Kiel.


La historia de Schleswig-Holstein está formada por el conjunto de hechos desde la Prehistoria hasta el moderno establecimiento del estado de Schleswig-Holstein. Esta historia está marcada por su situación geográfica entre dos mares y la lucha de influencia entre Dinamarca y Alemania. El río Eider se convirtió a partir del siglo IX en la frontera entre daneses y alemanes, si bien a lo largo de los siglos este territorio ha pertenecido, en todo o en parte, bien a Dinamarca, bien a Alemania, o han sido virtualmente independientes de ambas naciones. La excepción es que Schleswig nunca fue parte de Alemania hasta la Guerra de los Ducados en 1864. Durante muchos siglos, el rey de Dinamarca era a la vez duque danés de Schleswig y duque alemán de Holstein.

Origen del nombre

El término "Holstein" deriva del antiguo sajón Holseta Land, (Holz y Holt significan bosque en moderno alemán estandarizado y en inglés literario, respectivamente). Originariamente, se refirió a la parte central de las tres tribus sajonas al norte del río Elba: Tedmarsgoi (Dithmarschen), Holstein y Sturmarii (Stormarn). La zona de la tribu de los Holsts estaba entre el río Stör​ y Hamburgo, y después de la cristianización, su principal iglesia estaba en Schenefeld.
El término Schleswig viene de la ciudad de Schleswig. Deriva de la ensenada de Schlei en el este. Vik significa ensenada en noruego antiguo o asentamiento en antiguo sajón. Es una palabra lingüísticamente idéntica (cognada) con el elemento "-wick" o "-wich" en topónimos en Gran Bretaña.

Prehistoria y Antigüedad

Jutlandia es una larga península en el norte de Europa, de la cual el actual Schleswig-Holstein ocupa la parte meridional. A Schleswig también se le llama Jutlandia meridional (Sønderjylland). La pauta de zonas pobladas y despobladas fue relativamente constante a lo largo de la Edad del Bronce y la Edad del Hierro.

Las antiguas sagas escandinavas, que quizá se remonten al tiempo de los anglos y los jutos, dieron la impresión de que Jutlandia se había dividido en una parte norte y otra sur con la frontera a lo largo del río Kongeå. Tomando en consideración tanto los hallazgos arqueológicos como las fuentes romanas, sin embargo, puede concluirse que los jutos habitaban tanto la región del Kongeå como la parte más septentrional de la península, mientras que los anglos vivieron aproximadamente donde más tarde surgirían las ciudades de Haithabu y Schleswig, los sajones (conocidos con anterioridad, aparentemente, como los reudigni) en principio se centraron el Holstein occidental (conocido históricamente como "Nortalbingia") y wagri eslavos, parte de los abroditas en Holstein oriental. Los danos se asentaron en la primera época vikinga en el norte y el centro de Schleswig y los frisoes septentrionales en Schleswig occidental, después del año 900.

Edad Media

Después de las migraciones

Después de que muchos anglos emigraran a las islas Británicas en el siglo V, la tierra que habían ocupado se relacionó con las islas danesas, posiblemente por una inmigración/ocupación parcial por los danos. Los contactos se incrementarían con el tiempo.
A partir de los topónimos actuales, la frontera lingüística meridional del idioma danés parece haber estado (empezando desde el oeste) hasta el río Treene, a lo largo del Danevirke (también conocido como Danewerk), cruzando luego el estuario del Schlei hasta Eckernförde, y dejando la península de Schwansen, mientras que la costa oeste de Schleswig había sido zona de idioma fridio.
Después de las migraciones eslavas, la zona oriental del moderno Holstein fue poblada por wagri (Vagri), un subgrupo de los abroditas (Obotritae).

Nordalbingia y Wagria en los siglos VIII y IX

El Holstein septentrional y Schleswig estaban habitados por danos. Por su parte, Nordalbingia (Nordalbingien en alemán, esto es, "tierra al norte del Elba"), en la parte occidental de Holstein, era una de las cuatro regiones administrativas del ducado medieval de Sajonia, siendo las otras Angria, Ostfalia y Westfalia. Nordalbingia estaba dividido en cuatro distritos: Dithmarschen, Holstein, Stormarn (norte del Elba) y Hadeln (sur del Elba). La parte oriental de Holstein, por su parte, era Wagria, y estuvo habitada por los wagrios (wagri) desde el siglo IX al XII.

Conquista de Nordalbingia por los abroditas y los francos

En la batalla de Bornhöved (798) (alemán: Schlacht bei Bornhöved) en el campo de Sventanafeld (Sventanapolje, eslavo: "campo sagrado") los abroditas, liderados por Drożko, se aliaron con los francos, y derrotaron derrotando a los sajones de Nordalbingia. Los sajones perdieron cuatro mil personas. Diez mil familias sajonas fueron trasladadas a otros lugares del imperio. Las zonas al norte del Elba (Wagria) fueron entregadas a los abroditas, mientras que Hadeln se incorporó directamente. Sin embargo, los abroditas pronto fueron invadidos por los danos y solo la intervención de Carlomagno los pudo rechazar al otro lado del Eider.

Lucha por Schleswig y Holstein

La región de Schleswig (Jutlandia meridional) estuvo al principio habitada por una mezcla de tribus germanas del oeste (cimbros, anglos y jutos), más tarde también por daneses germánicos septentrionales y frisones germánicos occidentales. Holstein estaba poblado principalmente por sajones germánicos occidentales, aparte de los wendos (coo los abroditas) y otros pueblos eslavos en el este. Los sajones se sometieron a Carlomagno en 804, quien nombró un conde franco. Los límites del Imperio llegaron en 810 hasta el Schlei en Schleswig.

El ejército danés unido defendió con éxito, frente a Carlomagno Danevirke, una barrera defensiva fortificada que cruzaba el sur del territorio al oeste del Schlei. En 811 se estableció en el Eider la frontera entre el Imperio franco y Dinamarca. La fortaleza se debió a tres factores: la pesca, el buen suelo que permitía pastos y cosechas y, en particular, los ingresos fiscales procedentes del mercado en Haithabu, por donde pasaba todo el comercio entre el mar Báltico y Europa occidental.

El Danevirke se construyó justo al sur de la carretera donde los barcos o las mercancías tenían que ser cargadas durante aproximadamente 5 kilómetros entre el Báltico y un pequeño río, el Rheider Au (en danés, Rejde Å) que conectaba con el mar del Norte. Ahí, en el punto más estrecho de Jutlandia meridional, se estableció Haithabu o Hedeby, protegida por la edificación Danevirke. Estaba en la ensenada Schlei enfrente de lo que hoy es la ciudad de Schleswig. Alrededor del año 900 un jefe tribal vikingo, Olav de Svealand, estableció un reino independiente. Sin embargo, su hijo y sucesor, Gnupa, murió en batalla contra el rey danés y este reino se desvaneció.
La frontera meridional cambió varias veces. En el siglo X, los emperadores alemanes establecieron una marca de Schleswig (Limes Danarum) entre el Eider y el Schlei como un puesto fronterizo del imperio contra los danos, estimulando la colonización alemana. Una inscripción sobre una piedra en los muros de la ciudad de Rendsburg (en danés: Rendsborg) ubicada en la frontera entre Schleswig y Holstein: Eidora Terminus Imperii Romani ("El río Eider es la frontera del [Sacro] Imperio Romano"). Más tarde, los suecos incendiaron Haithabu. La situación se estabilizó durante el reinado de Svend I de Dinamarca (986-1014), aunque se repetirían ataques a Haithabu, que al final acabó destruida por el fuego en 1066.
Al sur de Schleswig, el Imperio se enfrentaba a los eslavos. Estos últimos, conquistados y cristianizados, se rebelaron en 983, después de la muerte del emperador Otón III, y durante un tiempo volvieron al paganismo y la independencia. Los duques sajones, sin embargo, siguieron gobernando el centro de Holstein, y cuando Lotario de Suplimburgo se convirtió en duque de Sajonia (1106), enfeudó a Adolfo de Schauenburg con el condado de Holstein, como un subfeudo sajón, convirtiéndose en Adolfo I, conde de Holstein con los duques sajones, más adelante los de Baja Sajonia como señores feudales.

Siglo XII

El conde (jarl) Canuto Lavard, hijo de un rey danés y m. en 1131, se convirtió en duque de Jutlandia o Jutlandia meridional. Su hijo ascendió al trono danés, de ahí que la rama principal quedara con el reino, mientras que una rama cadete, descendiente de Abel I de Dinamarca, recibió el sur de Jutlandia (Slesvig) como su infantazgo. Durante el gobierno de la dinastía sobre Jutlandia meridional, proporcionó ingresos a los príncipes reales. La rivalidad en la sucesión al trono y en particular la tendencia a la autonomía llevó a enfrentamientos duraderos entre los duques de Schleswig y los reyes de Dinamarca en el período 1253-1325.

En aquella época, el Sacro Imperio se expandió hacia el norte. Había nombrado a los Schauenburg como condes de Holstein, bajo soberanía alemana, primero ubicados en Nordalbingien, la parte sajona de la región, en lo que hoy es Holstein occidental. Canuto Lavard también tuvo parte de Holstein, y así entró en conflicto con el conde Adolfo I (Schauenburg) en la parte de Holstein que estaba dentro del Imperio, pues ambos pretendían extender su influencia y pacificar a la tribu de los wagrios (véase: wendos). El conde Adolfo II (1128-1164), hijo de Adolfo I, estableció (1143) las fronteras que Holstein mantiene desde entonces. Fue cristianizado, mataron a muchos de los wagrios y la tierra fue poblada por colonos procedentes de Westfalia, Frisia y Holanda. Fundó la sede de Lübeck para mantener controlados a los wagrios. En 1188, Federico I Barbarroja da a la ciudad de Lübeck el privilegio, lo que la transforma en capital de la Liga Hanseática. Pronto las ciudades de Hostein, como Lübeck y Hamburgo, se convertirían en serias competidoras comerciales en el mar Báltico.

Siglo XIII

Adolfo III (m. 1225), sucesor de Adolfo II, recibió Dithmarschen como feudo de Federico I, pero en 1203 la suerte de la guerra le obligó a rendir Holstein a Valdemar II de Dinamarca. La cesión fue confirmada en una Bula de Oro de Federico II en 1214 y el papa en 1217, provocando así a los nobles de Holstein.
En 1223, el rey Valdemar y su hijo mayor fueron secuestrados por el conde Enrique I de Schwerin, y lo tuvo cautivo en el castillo de Dannenberg durante varios años. El conde Enrique exigió que Valdemar lo conquistado en Holstein veinte años atrás y se convirtiera en vasallo del emperador. Enviados daneses rechazaron estas condiciones y Dinamarca declaró la guerra. Acabó con la derrota de las tropas bajo el mando de Alberto de Orlamünde en Mölln (1225), y Valdemar se vio obligado a devolver sus conquistas como precio de su propia liberación y prestar juramento de no buscar venganza. Cuando fue liberado de su cautiverio (1226, apeló al papa Honorio III para que revocase su juramento, petición que el papa le concedió. En 1226, Valdemar atacó a los nobles de Holstein, y al principio tuvo éxito.
El 22 de julio de 1227 los dos ejércitos se enfrentaron en Bornhöved en Holstein en la segunda Batalla de Bornhöved. Fue una victoria decisiva de Adolfo IV de Holstein. Durante la batalla, las tropas de Dithmarschen abandonaron el ejército danés y se unieron al de Adolfo. En la posterior paz, Valdemar II abandonó sus conquistas en Holstein, que quedó así asegurada de forma permanente para la casa de Schauenburg.
El rey Valdemar II, que había conservado la marca imperial al norte del Eider, hizo de Schleswig un condado en 1232 para su hijo segundo, Abel. Holstein por su parte, después de la muerte de Adolfo IV en 1261, fue dividido en condados, por sus hijos primero y por sus nietos después (1290): así nacieron Holstein-Kiel (1261-1390), Holstein-Pinneberg y Schaumburg (1290-1640) al sur del Elba, Holstein-Plön (1290-1350), Holstein-Rendsburg (1290-1459), y a veces también Holstein-Itzehoe (1261-1290) y Holstein-Segeberg (1273-1315), y de nuevo 1397-1403), recibiendo todos ellos el nombre de las ciudades en las que residía el conde.

Siglo XIV

Las relaciones entre Schleswig y Holstein se estrecharon en el siglo XIV, a medida en que fue poblándose el ducado de Schleswig. Los señores locales de Schleswig ya se habían esforzado antes en mantener a Schleswig independiente del reino de Dinamarca y fortalecer los lazos con Holstein, dentro del Sacro Imperio. La rivalidad entre los duques abelianos de Schleswig y los reyes de Dinamarca a veces llevaba a la guerra, y esto era caro. Dinamarca tenía que financiarse a través de préstamos. Los duques de Schleswig se aliaron con los condes de Holstein, quienes se convirtieron en los principales acreedores de la corona danesa, también, en el reinado del muy incompetente Cristóbal II de Dinamarca.
Cuando murió Erico VI de Dinamarca en 1319, Cristóbal II intentó tomar el ducado de Schleswig cuyo heredero, el duque Valdemar V (en 1325) era menor de edad; pero el tutor de Valdemar, su tío Gerardo III, conde de Holstein-Rendsburg (1304-1340), apodado el Grandem y un destacado guerrero, rechazó a los daneses. Habiendo expulsado a Cristóbal, consiguió la elección del duque Valdemar como rey danés (como III en 1326), mientras que el propio Gerardo consiguió para sí mismo el ducado de Schleswig. 
La mayor parte de los nobles daneses consideraron a Valdemar III como un usurpador, obligado por la nobleza de Schleswig-Holstein a firmar la Constitutio Valdemaria (7 de junio de 1326) prometiendo que El ducado de Schleswig y el reino de Dinamarca nunca deben unirse bajo el mismo gobernante. Por eso fue entregado Schleswig al conde Gerardo, líder de una de las tres líneas de la dinastía de Schauenburg. La constitución puede verse como precursora del tratado de Ribe por establecer el principio similar de separación entre el ducado de Schleswig y el reino de Dinamarca. De hecho, unía Schleswig y Holstein por vez primera, aunque en unión personal.

En 1330, Cristóbal II fue restaurado en el trono, y Valdemar III de Dinamarca abdicó, volviendo a su anterior posición como duque de Schleswig que tenía como Valdemar V de Schleswig. Como compensación, a Gerardo se le entregó la isla de Funen como un feudo. En 1331 estalló la guerra entre Gerardo y Cristóbal II, que acabó en derrota danesa. Los términos de la paz fueron muy duros. El rey Cristóbal quedaba solo con el control efectivo de la pequeña isla de Langeland y se enfrentaba a la tarea imposible de reunir 100.000 marcos de plata para redimir su país. Dinamarca había sido disuelta con efectividad y quedó sin rey entre 1332 y 1340. Gerardo, sin embargo, fue asesinado en 1340 por un danés.
En 1340, el rey Valdemar IV de Dinamarca emprendió su proyecto de más de veinte años, de reclamar su reino. Tuvo éxito recuperando el control sobre Zelandia, Funen, Jutlandia, y Escania, pero fracasó a la hora de controlar Schleswig, y su línea ducal consiguió continuar con una independencia virtual. Se casó con la hija de su rival, Eduvigis de Schleswig, la única hija de Erico II de Schleswig. En 1356, una subida en la marea inundó buena parte del territorio de Schleswig-Holstein. En 1372, Valdemar Atterdag prestó atención a Schleswig y conquistó Gram en 1372 y Flensburg en 1373.
El hijo de Valdemar V de Slesvig, Enrique, recibió el ducado en 1364, nominalmente, aunque nunca logró recuperar más que las partes más al norte, pues no pudo reunir los fondos necesarios para abonar los préstamos. Había hipotecado partes del sur de Scleswig a varios nobles alemanes. Enrique, ya de cierta edad y sin hijos, transfirió sus derechos a su compatriota y cuñado el rey Valdemar IV en 1373. Los nobles étnicamente germanos, sin embargo, rechazaron permitir al rey devolver el préstamo y redimieron la zona en cuestión. En 1374, Valdemar adquirió tierras en la provincia y estaba a punto de empezar una campaña para conquistar el resto cuando murió el 24 de octubre de 1374 y poco después falleció el duque Enrique I, en 1375. Fue entonces cuando las líneas masculinas, tanto en el reino como en el ducado, se extinguieron.
El verdadero tenedor de las tierras de Schleswig era el conde de Holstein-Rendsburg, quien rápidamente se apropió de Schleswig, asumiendo al mismo tiempo el título de "señores de Jutlandia". Los nobles rápidamente emprendieron la acción y lograron recuperar más control del ducado, que ellas insistían en que era independiente de la corona danesa.
Los herederos feudales de Enrique eran su prima carnal Margarita de Dinamarca, reina de varios reinos escandinavos, y Alberto IV de Mecklemburgo, hijo de la hermana mayor de Margarita, Ingeborg de Dinamarca. En 1386, la reina Margarita, hija menor de Valdemar IV de Dinamarca y Eduvigis de Schleswig, otorgó Schleswig como un feudo hereditario bajo la corona danesa al conde Gerardo VI de Holstein-Rendsburg, nieto de Gerardo III, siempre que jurase lealtad a su hijo el rey Olaf, aunque Schleswig de hecho aún lo tenía de forma independiente el conde de Holstein-Rendsburg. Gerardo - después de la extinción de las líneas de Holstein-Plön (1350) y Holstein-Kiel (1390) – finalmente obtuvo también Holstein-Segeberg en 1403, gobernando de esta manera todo Holstein excepto Holstein-Pinneberg con los pequeños territorios Schauenburg en Baja Sajonia. Con esta fusión de poder empieza la historia de la unión entre Schleswig y Holstein.

Siglo XV

Gerardo VI murió en 1404, y poco después estalló la guerra entre sus hijos y Erico de Pomerania, el sucesor de Margarita en el trono de Dinamarca. Erico reclamó el sur de Jutlandia como una parte integral de la monarquía danesa. En 1409, el rey Erico VII de Dinamarca (Erico de Pomerania) obligó a los nobles alemanes a entregarle Flensburg. Estalló la guerra en 1410, y Erico conquistó Als y Ærø. En 1411, los nobles volvieron a tomar Flensburg, pero en 1412 ambos lados estuvieron de acuerdo en que un conde de Mecklemburgo resolviera la disputa. Otorgó la ciudad a Dinamarca, y Margarita I de Dinamarca tomó posesión de la ciudad. En Flensburg enfermó de peste y murió poco después. La Liga Hanseática intentó una nueva mediación en 1416. Ambos lados aceptaron y Dinamarca entregó la ciudad de Schleswig como prenda, y los de Holstein la fortaleza de Tönning. La mediación no tuvo éxito. En 1421, los de Holstein tuvieron éxito a la hora de recuperar Haderslev, Schleswig y Tønder.
En 1422, el duque Enrique X de Silesia-Sagan, enviado del emperador, fue reconocido como árbitro por ambas partes. Sin embargo, murió el 18 de enero de 1423 sin haber llegado a ningún acuerdo. El emperador Segismundo deseaba resolver la cuestión, una decisión a la que se oponían los nobles de Holstein. En 1424, el emperador Segismundo decidió, basándose en el hecho de que las personas de Schleswig hablaban danés, seguían costumbres danesas y se consideraban a sí mismos daneses, que el territorio en justicia pertenecía al rey de Dinamarca. Enrique IV de Holstein-Rendsburg protestó y se negó a acatar el veredicto.
En 1425 estalló de nuevo la guerra. En 1431, un grupo de burgueses proalemanes abrieron las puertas de Flensburg y un ejército de nobles alemanes entraron. En 1432 se acordó la paz, y Erico reconoció las conquistas realizadas por los nobles germanos. En 1439, el nuevo rey danés, Cristóbal III, compró la lealtad de Adolfo VIII de Holstein-Rendsburg, hijo de Gerardo VI, otorgándole todo el ducado de Slesvig como un feudo hereditario, pero bajo la corona danesa. A la muerte de Cristóbal ocho años más tarde, la influencia de Adolfo, él mismo uno de los herederos más próximos de las monarquías escandinavas, aseguró la elección de su sobrino el conde Cristián VII de Oldemburgo como rey de Dinamarca, sobrino suyo hijo de Eduvigis, su hermana.
Cuando Adolfo murió en 1459 sin descendencia, la dinastía Schauenburg en Holstein-Rendsburg se extinguió. Los condes Schauenburg de Holstein-Pinneberg no pretendieron suceder en Schleswig; su elección en Holstein-Rendsburg habría separado Schleswig y Holstein-Rendsburg, una ruina económica para muchos nobles de Holstein. Los nobles, sin embargo, no se ponían de acuerdo sobre qué curso seguir.
Fue así fácil para el rey danés Cristián I asegurarse la elección como duque de Schleswig y conde de Holstein-Rendsburg. En 1460 reunió a la nobleza en Ribe, y el 2 de marzo se mostraron conformes en elegirlo como sucesor de Adolfo VIII, para evitar la separación de las dos provincias. El 5 de marzo otorgó una carta de coronación (o Freiheitsbrief), emitida primero en Ribe (Tratado de Ribe, en danés, Ribe-brevet, en alemán, Vertrag von Ripen) y después en Kiel, que también repitió que Schleswig y Holstein-Rendsburg debían permanecer unidos "dat se bliven ewich tosamende ungedelt" (Bajo alemán medio o bajo sajón, esto es, que debían estar juntos e indivisos para siempre. El ascenso de Cristián al condado de Holstein-Rendsburg fue la primera sucesión en Holstein por vía femenina (Eduvigis, su madre y hermana de Adolfo).
Otra cláusula del tratado otorgaba a la nobleza el derecho a revelarse en caso de que el rey rompiera el acuerdo (un rasgo habitual en las cartas de coronación medievales). En relación a Holstein-Rendsburg, como formaba parte del Sacro Imperio, se unió de manera personal, pero no podía anexionar el condado a Dinamarca en una unión real.
En relación a Schleswig el arreglo sonaba extraño, ya que Schleswig era feudo de la corona danesa, de manera que el rey danés era vasallo de sí mismo. Sin embargo, los nobles vieron el acuerdo como una garantía contra una dominación danesa excesiva y como una garantía contra una partición de Holstein entre nobles daneses. La consecuencia más importante de este acuerdo fue la exclusión de Schleswig en posteriores leyes danesas, aunque el código de Jutlandia danés medieval (Jyske Lov en danés) se mantuvo como el código legal del ducado de Schleswig.

Finalmente, en 1472 el emperador Federico III confirmó el señorío de Cristián I sobre Dithmarschen (mera pretensión, solo se conquistó en 1559). Federico III elevó a Cristián como conde de Dithmarschen, Holstein-Rendsburg, y Stormarn a duque de Holstein, así alzando Holstein-Rendsburg, que era un subfeudo de Baja Sajonia a inmediación imperial. En Holstein-Pinneberg, sin embargo, el emperador permaneció solo como señor indirecto con el duque Juan V de Baja Sajonia siendo su señor feudal inmediato. 
En el siglo siguiente, Schleswig y Holstein fueron numerosas veces divididos entre herederos. En lugar de incorporar el sur de Jutlandia a Dinamarca, prefirió aprovecharse del sentimiento de los estados en Schleswig y Holstein en favor de una unión para asegurar ambas provincias.


Comentarios